lunes, 10 de agosto de 2015

Es ella y no otra


Y es la luna compañera de recuerdos y quimeras, 
de los pasos que perdimos entre las faces que rindiera. 
Y es escarnio y veladora, y por instinto madre incierta, 
como el sonido de ese llanto, el que irradio dicha primera.

Y es mano protectora y racimo bien maduro, 
tácita su esperanza, en la cara de lo oscuro. 
Y es rumbo y buhardilla y por defecto predilecta, 
de un aullido, de un soneto, de una turba que protesta.

Y es la luna mi guarida, mi patio con geranios, 
espejo de mi mundo, distancia en mis espacios. 
Es la misma plañidera, esa voz amarga y dulce, 
la que mientras triste callo, siempre inunda lo que ocurre. 

Es ella y no otra, la que suma y nunca elude.

No hay comentarios:

Publicar un comentario